Todos esperamos nuestras celebraciones anuales de cada año para festejar las cosas grandes y pequeñas que han sucedido en nuestras vidas. Pero si vivimos nuestras vidas sin buscar maneras de demostrar gratitud más continuamente que en una comida anual, al final, podríamos poner a nuestra familia y a nuestros hijos en un futuro peligroso. Piénsalo. Cuando no practicas la gratitud…
DESARROLLAS UN EGO NO SALUDABLE
Un ego saludable es importante. Quieres que tus hijos crezcan con la confianza para perseguir y lograr sus metas y para creer en sí mismos. Pero eso es diferente a que ellos crean que son mejores que los demás. Cuando desarrollas el hábito de expresar GRATITUD, generas un recordatorio constante de cómo otros han contribuido a tu éxito.
INVITAS AL TIPO INCORRECTO DE AMIGOS
La mejor manera de gastar rápidamente las buenas amistades es nunca mostrar gratitud. Puedes esperar al tipo correcto de amigos para evitar personas ingratas. Al mismo tiempo, aquellos que son ingratos tenderán a atraer amigos que son iguales.
ALIMENTAS UNA ACTITUD DE TENER DERECHO A TODO
Si quieres que tu hijo crezca y crea: “El mundo me debe”, entonces deja que su actitud ingrata pase desapercibida. La gratitud reconoce el valor que otras personas agregan a tu vida. El derecho implica que otros hacen algo por ti porque reconocen tu importancia. Sin un hábito de gratitud, te convences de que el resto del mundo debería ayudarte porque te lo mereces.
GENERAS INSATISFACCIÓN
Todos tendemos a divagar hacia una actitud de “nunca es suficiente” porque nos enfocamos en nuestros deseos. Cada vez que muestras gratitud, simplemente estás reajustando tu enfoque. La gratitud es simplemente desviar tu atención de lo que no tienes a lo que tienes. Si deseas que tus hijos se conviertan en adultos satisfechos, ayúdalos a aprender a estar agradecidos por lo que tienen.
FOMENTAS UN ESPÍRITU CRÍTICO
¿Alguna vez te has detenido a pensar que practicar una virtud positiva realmente te ayuda a superar una actitud negativa? Si tienes tendencia a ser celoso, aprende a alabar y celebrar lo que otros logran. Si tienes un problema con ser crítico o negativo, entonces vuélvete intencional para mostrar gratitud.
Así que, es simple. Si quieres criar . . . hijos egoístas, solitarios, que creen que tienen derecho a todo, insatisfechos y negativos, entonces no practiques la GRATITUD en tu casa.
Por Reggie Joiner